Djokovic achaca a un “fallo” de su equipo los errores en su visado para tratar de evitar su deportación de Australia
El Departamento de Inmigración de Australia pasa por ser uno de los más férreos del mundo. Precisamente por eso cada imagen que trasciende de Novak Djokovic dándole raquetazos a una bola de tenis, mientras el número uno se prepara para el Open que empieza el lunes que viene, cae como una bomba de neutrones sobre la Administración que lidera Scott Morrison. El Gobierno se centra en estrechar el cerco para justificar el inicio de un segundo proceso de deportación, desde el brutal revés que se llevó el pasado lunes, cuando el juez Anthony Kelly anuló la orden de anulación del visado del tenista y le liberó de su aislamiento (después de ser retenido al querer entrar en el país sin vacunarse y sin cuarentena pese a una exención médica).
Mientras el tenista intenta aclarar qué hizo tras dar positivo, sus abogados ganan tiempo ante una posible segunda cancelación de su visadoRead More